
La terapia de pareja puede ser una herramienta poderosa, pero ¿qué hacer cuando uno de los dos no quiere asistir? Este artículo ofrece consejos para manejar esta situación con respeto y apertura.
¿Por qué algunas personas rehúsan la terapia?
Motivos comunes
- Miedo a la vulnerabilidad o al cambio
- Falta de información o prejuicios sobre la terapia
- Creencia de que el problema no es tan grave
- Experiencias negativas previas
Cómo actuar si tu pareja no quiere venir a terapia
Recomendaciones prácticas
- Respeta su decisión: La presión puede generar rechazo.
- Comunica tu necesidad: Explica por qué para ti es importante y cómo puede beneficiarles.
- Propón alternativas: Terapia individual, lectura conjunta o talleres.
- Sé paciente: El cambio y la aceptación pueden tomar tiempo.
- Cuida de ti mismo/a: No postergues tu bienestar esperando que la otra persona cambie.
¿Qué puede hacer la terapia individual?
La terapia individual te brinda herramientas para manejar la situación, mejorar tu bienestar y clarificar tus límites y decisiones.
Aunque la terapia de pareja idealmente es conjunta, el proceso individual también puede transformar la relación y abrir caminos para el encuentro.
¿Quieres empezar tu proceso aunque tu pareja no quiera asistir? Reserva una sesión individual y comencemos tu camino.
FAQ ¿Y si mi pareja no quiere venir a terapia?
¿Puedo hacer terapia de pareja si mi pareja no quiere venir?
Sí, la terapia individual puede ser muy útil para manejar la situación.
¿Cómo convencer a mi pareja para que asista?
Con respeto, comunicación clara y sin presionar, mostrando los beneficios.
¿Qué hago si mi pareja nunca acepta ir?
Cuida tu bienestar, establece límites y busca apoyo profesional.
¿La terapia individual puede mejorar la relación?
Sí, trabajar en uno mismo puede generar cambios positivos en la pareja.